Romper
mis esquemas. Eso es lo que ha
conseguido esta historia. Tanto es así que, excepcionalmente, cambio incluso mi
forma de valorarla.
“Debemos enamorarnos de la persona que se merezca nuestro amor.”
Esta
frase ha hecho que, por una vez en mucho
tiempo, haya deseado que el final de un libro se desarrollara de forma
diferente. Y no es que el que tiene no me haya gustado, ojo, pero es que la
historia es tan intensa que, a mí por lo menos, me ha hecho tener sentimientos
opuestos en cuanto a si ése debería ser el camino adecuado a seguir por los
protagonistas. Intentaré explicarme sin destriparos el libro y ya me comentaréis si sois de mi misma opinión. Vamos al lio!
Este
es ese tipo de libros en el que sientes que todos y cada uno de los personajes
tienen su sitio. Influyen en la historia de los protagonistas pero además,
tienen sus propias historias, que se entrelazan, sin eclipsar en ningún momento
la de ellos, dando pinceladas de lo que podría ser una maravillosa serie (ahí
lo dejo).
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April
es una joven que sacrifica una parte de su vida por ayudar a su familia.
Dispuesta a partirse la cara por los suyos y conseguir que todo vuelva a la
normalidad. Una auténtica Guerrera luchando contra todo y contra todos por lo
que cree que es correcto, aunque finalmente los acontecimientos, a mi modo de
ver, la superan. Y parte de esto, de su forma de actuar frente a lo que
descubre, es lo que me hizo replantearme si de verdad ella es lo que Keanu
necesita.
Keanu
es el sueño de toda chica. Guapo a rabiar y con un cuerpo de infarto. Sabe que
con chasquear los dedos puede tener a cualquier mujer comiendo de su mano. Sin embargo, su mirada, enigmática y en
ocasiones oculta, deja ver mucho más de lo que intenta esconder. Arrastra tanta
“mierda” a sus espaldas que es difícil separar al verdadero Keanu del que se ha
“fabricado” para seguir adelante.
Pero
cuando sus miradas se cruzan, el vértigo se apodera de ambos, entrando de lleno
en una montaña rusa de sentimientos tan intensos que, en momentos, son
incapaces de controlar. Hasta que todo se desmorona y April descubre que la
realidad es mucho más cruel de lo que esperaba y que hacer lo correcto, no
siempre es lo ideal ni el camino más fácil de tomar.
Hace
mucho tiempo que no amaba a todos y cada uno de los personajes de un libro:
Anita,
la tía de April, una mujer luchadora y dispuesta a soportar todo por su hijo,
incluso su desprecio. Ryan, el primo
arrogante, borde e intransigente que sin embargo no duda en sacar la cara por
los suyos. Maeve, esa amiga incondicional que todos deberíamos tener. Emma, la
chica que no tira la toalla en ningún momento. Y como no, adoro a todos y cada uno de los componentes del
grupo Sweety Iron: Dean el bromista y conquistador, Sebastian el perfeccionista
y Phil, el chico de la mirada triste y el corazón roto.
Pero
sobre todos ellos, estoy completamente rendida a los pies de Keanu. Enamorada
de cada una de sus miradas, de cada una de sus caricias, de cada una de sus
palabras, hasta de sus inseparables gafas de sol. Todas y cada una de sus
frases (podría citar un montón de ellas) encierran tantos sentimientos y tanta fuerza, que te bombardean directamente al corazón. Para mí, sin lugar a dudas, esta historia es toda suya.
Gracias
Scarlett por este grandísimo personaje. Para mí, has creado un mito.
Una
historia intensa, vertiginosa y emotiva, con unos personajes que te atrapan el
alma y te pellizcan el corazón. Un amor extremo, que se te mete bajo la piel y
se graba a fuego en ella. Y todo con un único fin: Perseguir un imposible e
intentar alcanzarlo.
Hoy
no habrá palabra para valorar el libro. Hoy será un título de película. Y no
hay mejor película que lo defina que Rebelde sin Causa. Eso sí, con un final
bastante más feliz